miércoles, 31 de julio de 2013

MILITANCIA CRISTIANA: REMIGIO VÉLEZ

Hoy, cuando apenas se habla de militancia cristiana es necesario volver a hablar de ella. Hoy, que los sindicatos del Norte enriquecido no quieren militancia, es necesario hablar de que un tiempo no lejano hubo sindicalistas militantes. Hoy, cuando se habla de caridad política pero se practica –sobre todo- asistencialismo- es necesario conocer el testimonio de personas que han vivido la caridad política.

Aquí, cerca de nosotros, con toda sencillez. Sin salir en los periódicos, más bien marginados por la gran y pequeña prensa. Uno de los canarios que pasará a la historia del siglo XX es todavía hoy un gran desconocido. La ciudad y la comunidad cristiana tienen el deber de reconocer la importantísima tarea del militante cristiano Remigio Vélez Rodríguez.

Fue el más significativo de los responsables sindicales de la lucha obrera en el Puerto de La Luz de Las Palmas de Gran Canaria durante la última etapa del franquismo y la transición. A partir de entrar en contacto con la HOAC (Hermandad Obrera de Acción Católica) y la Editorial ZYX Remigio potenció sus cualidades

Su militancia obrera, desde la fe, le llevó a crear sindicatos. Fue un gran impulsor de éstos, reuniéndose con numerosísimos grupos, a los que animó a trabajar; pero todos, como los Sindicatos Autónomos que fundara con otros en el Puerto, tienen esa impronta cristiana. No era un burócrata, hablaba ahora con la patronal y al terminar bajaba a cargar, era un compañero más.

No podemos pasar por alto en el desarrollo de todo el conflicto de los portuarios la presencia y participación activa de las familias, demostrando que es posible y ha sido realidad en nuestra historia la familia como núcleo de solidaridad y abierta a los problemas de la colectividad. La actitud demostrada por parte de las mujeres estuvo llena de valentía y generosidad. Algunos ejemplos fueron las manifestaciones de mujeres e hijos de los estibadores desde la Iglesia del Carmen, en la Isleta.

Remigio murió de cáncer de estómago, consciente de su enfermedad, sabiendo que duraría sólo unos meses, lo que aceptó con la entereza que le daba la fe y que asombró a todos. El día 20 de febrero de 1991 fue enterrado.

Sus últimas palabras públicas fueron pronunciadas el 25 de julio de 1990: “Belén María perdura en nuestro recuerdo, pero yo puedo decir que hoy ha sido un poco más masiva la participación de los estibadores portuarios. No sólo queremos la participación de los estibadores, de los hijos, sino del público en general, de todos, porque recordamos que no sólo luchamos los trabajadores, luchaba también la gente de fuera… Era una lucha encarnizada que había en el puerto. ¿Qué queda de aquellos estibadores portuarios que luchamos tanto? Pues quedan muy pocos y quizá dentro de dos meses no va a quedar ninguno. ¿Entonces qué pasa? Los logros que los estibadores hemos conseguido, de cualquier forma la Administración los echa abajo. Entonces tendrá que haber una lucha continuamente de estibadores porque se irán los que están y vendrán otros. Pero nosotros lo único que queremos, los estibadores viejos, es que siempre Belén María esté en el recuerdo de todos. Gracias”.

Un mundo necesitado de testigos necesita testimonios como este. Por ello el Movimiento Cultural Cristiano ha editado un dvd de poco más de 20 minutos sobre el militante cristiano y responsable sindical portuario Remigio Vélez Rodríguez.