domingo, 17 de agosto de 2008

La Caja de Ahorros ha prestado este año casi 3 millones de euros con el empeño de joyas

M. PINO PÉREZ - LAS PALMAS DE GRAN CANARIA.
El empeño de joyas está siendo para muchas familias canarias la única opción para obtener dinero con el que salir adelante, sobre todo porque no pueden solicitar ni un pequeño crédito a la banca de otra forma. La actual coyuntura económica está motivando un incremento en los préstamos a través del depósito de abalorios de oro. En lo que va de año, de enero a julio, el Monte de Piedad de la Caja de Canarias ha concedido casi 3 millones de euros (2.730.000) en préstamos a través del depósito de joyas.
NO RECUPERAN LAS JOYAS. Si bien el incremento no es muy alto, lo que sí llama la atención, según explica el director del Monte de Piedad, José Román Cabrera, es que un 16% de esos depósitos en joyas no se recuperan, porque pasado el año los clientes no han podido ahorrar el dinero para saldar el préstamo. En esos casos, y tras dos meses más de plazo, la entidad los subasta. Para recuperar los objetos basta con abonar la deuda y los respectivos intereses, que oscilan entre el 7,5% y el 9,30% según el importe solicitado. También se puede optar por renovar el préstamo por otro año, y así hasta tres años siempre que se paguen los intereses.Cada mes esta entidad concede una media de 1.000 préstamos a través del empeño de las piezas de oro, y el conjunto de las operaciones ronda entre los 15.000 a los 20.000 euros al día.Los clientes del Monte de Piedad son en su mayoría mujeres, si bien acuden no sólo con sus joyas sino con las de toda la familia. Según aseguran en la entidad siempre han sido las mujeres las que se acercan para intentar resolver la situación familiar. Además, se ha detectado que un 20% de esas mujeres son inmigrantes que precisamente llegan con muchos objetos de valor para poder empeñarlos cuando las cosas no les salen como esperaban.En muchos casos, la pérdida del puesto de trabajo está cogiendo a las familias sin ahorros y no les queda más opción que el empeño de joyas. En La Caja de Canarias dan por hecho que cuando acabe agosto y deban hacer frente a los gastos de libros y ropa para el colegio se vuelva a registrar otro incremento en las solicitudes de préstamos.